Tomás Cabal, 1897 nace en Valladolid, España, 1966, y muere en Chiriquí, Panamá.
En el 2010 expone la retrospectiva ‘luz y color' Museo de Arte Contemporáneo, Panamá.
Pintor, sacerdote, paisajista. Nace en Valladolid, España, se traslada de joven a Madrid donde recibe estudios de pintura en la academia de San Fernando, es influenciado por el impresionismo español y su maestro Sorolla. A la vez, recibe su formación eclesiástica del seminario mayor.
Pintor a medio tiempo y sacerdote por vocación, con el fin de ejercer la misión, llega en 1925 al Istmo de Panamá. Un par de años después abandona el sacerdocio y establece una familia en Dolega, Chiriquí. Allí inicia una búsqueda espiritual de índole visual y sensitiva, a través del oficio que ya había estudiado, Pintar.
En su obra busca captar cómo la fuerza del espíritu santo está reflejada en la creación cotidiana de nuestra naturaleza, el campo, los árboles, las montañas, la profundidad del mar.
Destacado dentro del grupo de maestros, cómo una figura relevante en el arte panameño.
Su rigurosa disciplina académica fue completada con estudios de dibujos y pintura en la Academia de San Fernando. Posteriormente, viajó a Chile y después de una corta estadía, Vino a Panamá, en donde residió hasta su muerte acaecida en Dolega, Chiriquí, el 12 de mayo de 1966.
Filósofo, poeta y pintor son las tres palabras que describen la vida creativa e intelectual de Tomás Cabal Barros.
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FICHA TÉCNICA
Autor: Tomas Cabal
Titulo: sin titulo
Técnica: óleo sobre papel Kodak
Medida: 14' x 10'
Año: circa 1964 Óleo sobre tela, con una perspectiva horizontal, de trazos en movimiento rápido y fuerte. En tonos naranja y predominando el marrón. La composición señala el arriba y abajo. Con un cielo característico del impresionismo, equilibrando en un reflejo rosa el naranja inferior. Exactamente en la mitad del plano, se ve en detalle lo que parece una casa, en el fondo cerca al limite, un azul de corriente fresca, que remite a un río alimentando el horizonte. El agua nos da un alivio frente a la atmosfera sórdida que carga el primer plano. La pincelada vivaz insinúa una brisa leve en medio del calor que remite quizá a un recuerdo de la cuenca que rodea su ciudad natal. Gabriela Esplá, maestra en artes plásticas. Diciembre 2015